lunes, 9 de enero de 2012

¿Quien es Saulo?

Por Serminio Sanchinel | Enero 9, 2012

Era de una ciudad llamada Tarso[1], ubicada en el Asia menor. Tarso significa «canasta plana».

Nacio entre los años 5 y 10 dC. en la región de Cilicia, en la costa sur del Asia Menor (la actual Turquia). La ciudad de Tarso tenía concedida la ciudadanía romana por nacimiento (Hechos 22:22-29). Por lo que Saulo tambien era ciudadano romano.

Al estar en Asia menor, tuvo la oportunidad de vivir en medio de la cultura mas avanzada de la epoca, ya que esta ciudad, Tarso, era mas o menos como una ciudad universitaria, en donde sobresalia la cultura, filosofia, tenia bibliotecas, universidades y muchos lugares en donde destacaban, la poesia y la filosofia.

El nombre antiguo es Tarsos, probablemente derivado del dios Tarkus. Su importancia en la Antigüedad se debió a su ubicación, ya que se encontraba en el camino de varias rutas comerciales importantes, que enlazaban el sur de Anatolia con Siria y la región del Ponto. Las ruinas están cubiertas por la ciudad moderna, por lo que no es bien conocida arqueológicamente. El asentamiento humano se remonta cuando menos a la Edad de Bronce, pero probablemente sea aún más antiguo.

Tarso formó parte de los imperios persa y seléucida. Luego de la conquista romana, fue capital de la provincia de Cilicia.

Saulo fue influenciado bajo las culturas helenistica y romana, al poseer la ciudadania romana, tenia un praenomen[2] relacionado con una caracteristica familiar, por eso su primer nombre Saulo «pedido», lo caracteriza con su familia, de seguro, en el ambito familiar, ese hombre fue pedido, y Dios lo concedio a quien lo pidió.



[1] G5018 Ταρσεύς Tarseús de G5019; de Tarso, i.e. nativo de Tarso:- Tarso.

G5019 Ταρσός Tarsós tal vez lo mismo que ταρσός tarsós (canasta plana); Tarso, un lugar en Asia Menor:- Tarso.

[2] Praenomen deriva del prefijo prae- ("antes de") y nomen ("nombre"). El praenomen de los romanos correspondía al “nombre de pila” en la actualidad, siendo el único nombre en que los padres tenían elección. Por regla general, sólo la familia inmediata llamaba a una persona por supraenomen. Se trataba de un nombre personal dado a un varon recién nacido, tras purificarlo (lustrare), y era siempre coincidente con el de alguno de sus antepasados. Durante la mayor parte de la historia romana, las mujeres no tenían praenomen: a las niñas se les daba su nomen, siempre coincidente con el de su familia (gens). De este modo, las niñas de las gens Iulia (Julia) se llamaban todas Julia, y Cornelia las de las gens Cornelia, incluso con posterioridad a su matrimonio. Únicamente se les podía añadir un cognomen que correspondía a un numeral para distinguir su posición en el nacimiento: Prima, Secunda, Tertia, ..., Minor.